El Popocatépetl es uno de los volcanes más peligrosos y vigilados a nivel mundial. Este registró actividad al arrojar “lluvia de ceniza”, la más fuerte desde 1994 dado que no sólo cayeron fragmentos incandescentes a 1.6 km de sus laderas, cubriendo de blanco a la ciudad de Puebla y las poblaciones de Benito Juárez. Huejotzingo, San Martín Texmelucan, San Nicolás de los Ranchos y San Pedro, sino que la columna de ceniza tiene tres kilómetros de altura.
Estas localidades no son las únicas que se encuentran en el radio de riesgo del volcán, también destacan Atlixco, Amecameca, Cholula, Hueyapan, Ozumba, Tetela del Volcán y Xalitzintla -en el estado de Puebla-, la Ciudad de México, Cuernava y Tlaxcala.
Así que si a tu auto le cayó ceniza volcánica, te decimos cuál es la mejor manera de retirarla:
Si las partículas de ceniza se depositaran sobre su vehículo, no las dejes más de 5 días ya que por su alto nivel de acidez, la ceniza es abrasiva.
Eso sí, cuando lo hagas, no te olvides de usar una mascarilla para proteger tus pulmones y lentes protectores para los ojos.
No uses cepillos, espátulas, trapos, escobas para tratar de quitarla. Recuerda que si enjuagas cualquiera de estos instrumentos, las partículas se quedan en el agua y volverías a impregnar los elementos de limpieza.
Lo ideal es usar aire comprimido o un soplador, aunque mojarlo con agua tratada también puede ayudar si está disponible.
También, no uses hidrolavadora, lo mejor es recurrir a la manguera con presión normal.
En caso de lluvia, neblina o rocío las cenizas se pueden impregnar formando una mezcla grumosa que es altamente abrasiva.
Debido a esto, no la remuevas porque rayarías las superficies del vehículo, ya sean metálicas, pintadas o de vidrio.
Solo cuando hayas diluido y retirado la ceniza puedes lavar tu auto normalmente. Se recomienda usar una detergente con pH neutro para cancelar la acidez del azufre presente en el residuo volcánico.
Si bien la mayoría de los conductores presta atención al cuidado de la pintura y cristales debido al efecto abrasivo de las cenizas, la parte mecánica puede ser la más afectada.
Los vehículos cuentan con un “filtro de aire” que cuida el motor de toda la suciedad que flota en el ambiente. A medida que va cumpliendo su función,la acumulación de impurezas va restringiendo el flujo del aire hacia el motor provocando dos grandes problemas: disminución de potencia y aumento del consumo de combustible.
La ceniza juega aquí un factor importante ya que queda impregnada en el filtro con un efecto más obstructivo que la tierra.
Normalmente, un filtro de aire se debe cambiar cada año o 15.000 km si es original, cifra que disminuye a más de la mitad si es de “marcas alternativas”. Todo dependerá también del uso que se le dé al vehículo. En caso de querer cerciorarte personalmente solo extrae el filtro y abre sus láminas para encontrar el particular polvillo acumulado, éste se diferencia por ser más claro que la tierra y gris. Limpiarlo con un soplete u otros medios resulta inútil ya que las partículas de suciedad se encuentran impregnadas.
Hay que aclarar que las cenizas no afectan otros filtros como los de combustible o aceite, al menos en los vehículos modernos (hasta 10 años aproximadamente) lo mejor será en este caso reemplazar el filtro.
En zonas donde hubo mayor cantidad de ceniza esparcida, se recomienda también sopletear el radiador para eliminar los depósitos que pueden afectar la circulación de aire a través de sus láminas, provocando un mayor calentamiento del motor.
Mejor acude a un taller oficial o con tu mecánico de confianza para cambiar el filtro de aire si no se ha hecho desde la última vez que las cenizas del volcán sobrevolaron la ciudad.
Cabe señalar que a pesar de esta actividad registrada en Don Goyo, el semáforo se encuentra en amarillo fase dos pero hay que estar al pendiente si esta cambia en los próximos días.
Fuente: autocosmos